La protección del medio ambiente no es un mero espectáculo.
Cuando los fuegos artificiales artísticos de Arcteryx provocaron la indignación ambiental de los consumidores, esta crisis de reputación de marca puso la cada vez más prominente “agenda ambiental” en el centro de atención.
En los últimos años, conceptos como la protección del medio ambiente y la sostenibilidad se han convertido en palabras de moda en el marketing de marca. Muchas marcas destacan iniciativas "ecológicas", emitiendo declaraciones sobre conservación del medio ambiente, fabricando zapatos con posos de café y produciendo camisetas con plástico reciclado; estas medidas ecoconscientes se han vuelto comunes.

Fuera de línea, algunas marcas de ropa establecen talleres de reciclaje en las tiendas donde los consumidores pueden experimentar servicios de reparación de prendas y participar en actividades artesanales como reutilizar ropa vieja, transformando el ambientalismo en un evento social participativo.
Los cosméticos, conocidos por su alto consumo de materiales de embalaje, han recibido numerosas críticas por el embalaje excesivo y el desperdicio de recursos. A medida que los conceptos de embalaje ecológico cobran fuerza, cada vez más marcas adoptan soluciones de embalaje sostenibles.
Algunas marcas de belleza emplean la tecnología de moldeo por soplado con gradiente multicapa de un solo molde para el envasado de sus productos, reemplazando así la pintura en aerosol tradicional para reducir las emisiones de dióxido de carbono. Otras utilizan tintas ecológicas a base de soja para la impresión y adoptan cajas florales desprendibles para avanzar en la reducción del plástico en los envases.
Implementando la protección del medio ambiente hasta el más mínimo detalle
La protección del medio ambiente es un asunto complejo. No exige un retorno a las formas primitivas, abandonando la industria para volver a la existencia natural; ni aboga por un desarrollo desenfrenado, permitiendo emisiones y alteraciones arbitrarias una vez que la economía ha despegado.
A nivel macro, la protección del medio ambiente presenta una propuesta abierta. Cada marca o empresa puede, al mismo tiempo que equilibra su propio desarrollo, interactuar con los consumidores de diversas maneras para forjar un consenso sobre cuestiones de sostenibilidad.


En medio de esta ola verde, Yiree está incorporando el concepto de protección ambiental sustentable en cada detalle intrincado de sus procesos de producción a través de una acción continua.
En el ámbito tecnológico, Yiree explora constantemente técnicas de producción más ecológicas, como el recubrimiento en polvo. Este método no requiere la adición de disolventes, eliminando así las emisiones de compuestos orgánicos volátiles asociadas con las pinturas tradicionales.
El polvo que no queda adherido se recoge a través de un sistema de reciclaje específico y se reutiliza, reduciendo directamente la generación de residuos.
En el ámbito de la producción, Yiree lleva mucho tiempo implementando la purificación ecológica de las emisiones de sus fábricas. Para el vertido de aguas residuales, se ha establecido un centro de tratamiento de alta calidad. Mediante múltiples etapas de purificación, el efluente cumple con las normas de vertido más estrictas.
Para las emisiones de gases de escape, Yiree emplea unidades de recuperación de gases COV (compuestos orgánicos volátiles) de alta eficiencia para separar los compuestos orgánicos volátiles de los gases de escape, evitando así efectos adversos en la calidad del aire exterior. Esto se complementa con sistemas de monitorización en tiempo real para garantizar que las emisiones de escape se mantengan constantemente dentro de los parámetros controlados. En el embalaje, Yiree prioriza materiales ecológicos como paneles de nido de abeja de papel, cantoneras de papel y bolsas de plástico biodegradables, impulsando continuamente la reducción y el reciclaje de plástico para minimizar el impacto ambiental.
Por ejemplo, los protectores de esquinas de papel reemplazan completamente a sus contrapartes de madera y son 100% reciclables, reduciendo así el consumo de recursos forestales.
Desde la tecnología y la producción hasta el embalaje del producto, Yiree emplea estos enfoques sistemáticos de principio a fin para traducir grandes conceptos como la sostenibilidad y la neutralidad de carbono en prácticas tangibles e implementables.
Para las empresas manufactureras, impulsar prácticas ambientales sostenibles constituye un ajuste y una transformación sistémica a largo plazo. Abarca el rediseño de los procesos de producción, la I+D tecnológica, la optimización de la cadena de suministro, la investigación de materiales y mucho más, lo que equivale, en la práctica, a una reforma interna.

Yiree se fundó en Xiamen en 1998. Tras más de 27 años de colaboración y comunicación con clientes y proveedores, cumpliendo con las políticas ambientales, hemos buscado constantemente materias primas más ecológicas. Hemos elevado nuestros estándares, reducido nuestras exigencias al planeta y nos hemos esforzado por minimizar los residuos y el daño ambiental: estos son los pequeños pero firmes compromisos que mantenemos.
Ser amigo de la Tierra, asociarnos con la naturaleza y utilizar nuestra modesta influencia corporativa para inspirar un cambio positivo para nuestro hogar compartido.


